Washington D.C., 14 de julio de 2025 – La Corte Suprema de los Estados Unidos autorizó al presidente Donald Trump a continuar con su plan de desmantelar el Departamento de Educación mediante el despido de aproximadamente 1,400 empleados, como parte de su propuesta de reestructuración del sistema federal educativo.
La decisión, emitida en el caso McMahon contra Nueva York, fue publicada como una orden sin firmar y sin justificación escrita. Sin embargo, las juezas Sonia Sotomayor, Elena Kagan y Ketanji Brown Jackson manifestaron su desacuerdo formalmente.
Una instancia federal inferior había emitido anteriormente una orden judicial para frenar los despidos, ordenando además la reincorporación de algunos de los trabajadores cesados, lo que ahora queda anulado tras la resolución de la máxima corte.
La medida se enmarca en la Orden Ejecutiva 14242, firmada por Trump el pasado 20 de marzo, en la que prometía cerrar el Departamento de Educación, bajo el argumento de que la entidad ha impulsado una burocracia innecesaria y debilitado la autonomía educativa estatal.
“El departamento no educa a nadie”, señala el documento, que también critica que la agencia mantiene una oficina de relaciones públicas con más de 80 empleados y un presupuesto superior a los 10 millones de dólares anuales.
Durante su campaña electoral, Trump reiteró su intención de reducir drásticamente el papel del gobierno federal en asuntos educativos, trasladando competencias a los estados y eliminando estructuras que, según él, solo generan gastos y trabas administrativas.
La decisión de la Corte Suprema marca un precedente legal relevante sobre el poder presidencial para reestructurar agencias federales, y podría tener implicaciones significativas en otros departamentos del Ejecutivo.