Una tragedia sacudió a la comunidad cristiana y a la población guatemalteca la noche del miércoles 2 de julio. El pastor evangélico Rolando Chilel y su madre, Margarita Ramírez, fueron hallados calcinados dentro del baúl de una camioneta en San Marcos. El hecho ha sido calificado como un acto cruel e inhumano que ha causado profunda consternación.
El hallazgo ocurrió en horas de la noche, cuando vecinos alertaron a las autoridades tras observar un vehículo en llamas en un sector del departamento de San Marcos. Al sofocar el incendio, se descubrieron los restos carbonizados de dos personas en el interior del baúl de una camioneta tipo RAV4. Posteriormente, fueron identificados como el pastor Rolando Chilel, líder de la Iglesia Profecía Universal, y su madre, Margarita Ramírez.
Rolando Chilel era conocido en la región por su liderazgo espiritual y su labor social en favor de la comunidad cristiana. Su madre, una mujer de oración y respetada por su fe, lo acompañaba frecuentemente en sus actividades ministeriales. El asesinato de ambos ha generado indignación, dolor y un llamado urgente a la justicia por parte de líderes religiosos y vecinos del área.